Siendo ya la 1:55 de la madrigada del viernes, don Luis subió al escenario mayor del Anfiteatro Mario del Tránsito Cocomarola y comenzó su relato contando desde sí mismo su experiencia como hijo del Chaco, una tierra tan cercana geográficamente a Corrientes que le permitió desde muy niño observar y adentrarse en el conocimiento de los rasgos más distintivos de los hombres y mujeres del Taragüí, reflejando así con humor y gran poder narrativo las costumbres e idiosincrasia de nuestro pueblo.
Entre cuento y cuento, con el arte que lo caracteriza, el chaqueño fue cautivando al auditorio, que le demostró, primero con el silencio respetuoso y luego con el aplauso encendido, todo el cariño que supo ganarse a lo largo de su carrera artística.
"El correntino es un ser noble y leal, por algo siempre elegían un correntino para acompañar una patriada, pero guay si te portás mal…", decía con humor don Luis en medio de su relato, dando cuenta de ese poder de saber captar la esencia de cada cosa… Y el público como respuesta hizo vibrar de inmediato un sapucay al unísono en señal de afirmación.
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